Mulino inaugura proyectos para hacer más efectiva la seguridad en la provincia
La inauguración de este puesto de control
integral y los otros que vendrán de aquí a marzo en el resto del país, fue
calificado por el ministro como un hecho inédito, toda vez que es la primera
vez en muchos gobiernos, que se atiende las carencias de equipos y tecnología
de la fuerza pública. “El tiempo será nuestro mayor juzgador”.
El ministro Mulino reconoció el apoyo del
presidente de la república, Ricardo Martinelli en la lucha por lograr la
seguridad ciudadana y en seguir construyendo obras como la que hoy se
inauguran.
Esta frontera con Costa Rica, dijo el ministro
Mulino, no solamente comparte hitos que enmarca el territorio, sino también
comercio, agricultura, ganadería, pero así mismo, carros hurtados, inmigrantes,
narcotráfico, transporte ilícito y contrabando y “era nuestra obligación
utilizar los recursos del pueblo panameño en habilitar los nueve puestos de
control, que tienen un costo de B/.1,074,144.72”.
Durante el discurso, el titular de Seguridad
Pública dio su total respaldo a la ejecutoria del comisionado Ábrego al frente
del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) y envió un mensaje al pueblo
panameño: “no estamos a favor de molestar a nadie, pero si se quiere seguridad
hay que cooperar y se debe entender que se necesita vigilar y revisar”.
“El trabajo de la fuerza
pública es de la mejor buena fe y si hay errores y “abusos”, disculpen, no es
el propósito de ninguna autoridad, pero invertiremos más recursos del Estado en
tecnología. Esta frontera tendrá cámara de videovigilancia y de reconocimiento
facial en puntos estratégicos”, indicó Mulino.
Entre tanto, el director
del Servicio Nacional de Fronteras, el comisionado Frank Ábrego, dijo que la
responsabilidad de custodiar las fronteras es grande, pero “la hemos aceptado
con orgullo, porque es la única en el mundo que no divide a dos naciones, por
el contrario, une a dos pueblos hermanos, por lo que se requiere de unidades
especializadas como el Batallón Occidental”.
El acto inaugural, que
contó con la presencia del viceministro Alejandro Garuz, la gobernadora Aixa
Santamaría y los diputados Osman Gómez, Rogelio Baruco y Rony Araúz, estuvo
abarrotado por moradores de San Isidro.